Sin temor

Bailé sin descanso.
Canté una canción
sin temer al mundo,
sin temer a nadie.

No hubo música
ni público,
pero fui feliz.

No hubo letra
ni ritmo,
pero yo sentí.

No hubo danza
ni voz, 
pero era yo.

Yo que cantaba,
yo que bailaba
sin temor a nadie,
sin temor a nada.